NUTRICIÓN INFANTIL ACTUAL= INDUSTRIAL

Nina llena de miso.

‘Una cantidad creciente de niños son traídos al mundo cada día deformados y retardados. Es posible que estemos llegando al punto donde los niños saludables formen parte de un grupo minoritario. Poco o nada pueden hacer el gobierno o la ciencia médica.
Sólo los salvaremos si la mujer puede liberarse y aceptar su reponsabilidad personal para el futuro de sus hijos’.
Gloria Swanson en 1983.
Una puntualización en ‘poco o nada pueden hacer el gobierno o la ciencia médica’. Si que están haciendo ya que están creando a propósito cada vez más madres perdidas, desorientadas y dejadas a las manos de los señores de traje gris o bata blanca. Están manipulándolas diariamente consiguiendo cada día que sus hijos visiten más los hospitales que un celador y que tomen más medicamentos que una rata de laboratorio.

La progresiva transformación de la forma de criar a un niño en un campo científico ha llevado a dar valor a la idea de que sólo los ‘expertos’ poseen suficientes garantías para saber alimentarlo de forma correcta. La creciente confianza en el pediatra y en los alimentos industriales ha abierto un nuevo y gigantesto mercado: los alimentos dietéticos para niños. El destete se ha convertido en un sector de competencia del pediatra. La madre, el bebé y la familia están sumergidos en una especie de ‘aprendizaje sanitario obligatorio’ que tiende a sugerir que cuanto más asistido esté el crecimiento por el pediatra, el farmacéutico, la industria farmacéutica e infantil, mejor se estará llevando a cabo.
La industria farmacéutica y los pediatras (éstos últimos ‘comprados’  y ejerciendo como un vehículo de publicidad para las casas farmacéuticas más que como educador sanitario real) apoyándose en su propia competencia y status, y aprovechando esa inseguridad creada e impuesta de los padres, han conducido hacia un destete cada vez más temprano, precoz y artificial. Leer más de esta entrada

aMAMAntamiento Materno

Encuentro entre madre e hija. La experiencia más gratificante de mi amiga Eva. Su felicidad se refleja en su mirada

La leche ha de salir de la mujer, no entrar en ella. Cuando se invierte el flujo, el sistema energético da marcha atrás y todo queda bloqueado’. La leche materna se adapta a las necesidades del recién nacido: la composición varía en cada mujer y, en la misma mujer, en el curso de semanas, del día e incluso durante una misma toma.  La leche materna es sangre de la madre surgida en el cuerpo y convertida en las mamas en un líquido más dulce y menos salado. La formación de leche en las mamas es similar a un proceso de fermentación. Al principio, el bebé absorbe el calostro (líquido grueso amarillento) con alto contenido en calorías, anticuerpos, linfocitos y macrófagos, que es segregado por el pecho durante los primeros días que siguen al parto. Se le considera una transición entre la sangre de la madre y su leche. El calostro ayuda como laxante para expulsar el meconio (heces presentes en el intestino del feto antes de iniciar sus funciones); está compuesto por azúcares y es un alimento con alto contenido energético y de inmediata digestión. Su función es desarrollar el aparato digestivo del bebé, mantener la energía, es decir, vencer la lucha contra el frío, eliminar la biliburrina, la urea y el anhídrido carbónico reforzando su sistema inmunitario. No hay que asustarse ya que el bebé perderá un poco de peso durante los primeros días hasta que empiece a recibir la leche martena. Leer más de esta entrada